Ron Da Error (2021)

En algún momento de tu vida te has preguntado si la tecnología está para ayudarte, ¿o para hacer más difícil tu día? Después de todo, suele ser un poco desesperante que un dispositivo que usas se descomponga, que no responda a tus comandos o se ponga lento sin razón evidente.

Bueno, pues algo así le pasa a Barney, un tímido niño de 11 años, introvertido y que no tiene muchos amigos quien, luego de mucho pedirlo, recibe como regalo un robot que todo el mundo ya tiene: un Bubble Bot o B*Bot.

Pero el suyo es algo peculiar, para empezar se llama Ron. Y por una extraña razón, hace lo contrario a lo que se le ordena, de hecho, no sigue en nada su programación inicial.

Y aunque para algunos se trata de un B*Bot defectuoso, eso le permite a Barney entablar una amistad más entrañable, y no una obligada por un programa de computación.

Por lo pronto, Barney termina involucrado en todo tipo de aventuras, y de hecho, debe salvar a su nuevo amigo de varias situaciones de riesgo y enseñarle algunas lecciones básicas sobre su personalidad y de su forma de relacionarse con otros.

Y es que, todo lo que hace Ron se basa en las cosas que ve y oye, así que va construyendo su conocimiento del mundo al lado de Barney.

Y, fuera de todo pronóstico, este extraño par logra cultivar la amistad menos imaginada, incluso cuando hay que emprender un viaje lleno de retos.

Usemos mejor la tecnología

Esta cinta ocurre en una época donde la tecnología parece lo más importante, de hecho es un llamado de atención para los padres de familia, que entiendan la naturaleza superficial de las redes sociales, como se ha amplificado el acoso y la inseguridad, especialmente entre los más jóvenes.

Pero a la vez, busca que las nuevas generaciones aprendan a distinguir entre los amigos virtuales, esos que le ponen “like” a sus publicaciones y aquellos que frecuentas en la vida real. Y en este caso, comprender que un B*Bot no es un amigo porque deba serlo, sino porque su programación lo obliga a serlo, en otras palabras, no es un amigo, sino un sirviente digital.

La película podría ser una celebración al poder positivo que tiene la tecnología en nuestro mundo. Claro, si nos tomáramos un instante para reflexionar, no obstante, parece algo confusa.

Y es que queda claro que también parece advertirnos que las grandes compañías tecnológicas no ven por el bienestar de los usuarios, después de todo obtienen tus datos personales, ponen cámaras y micrófonos en tu casa, y muchas veces no piden autorización alguna antes de usarlos.