Sonic 2: La Película (2022)

En Sonic 2: La Película, el supervillano Robotnik regresa a las andadas, y envía un mensaje criticando el exceso de la maquinización actual que padece la sociedad.

Tiene una gran representación de cómo los seres humanos estamos viviendo nuestra vida, dependiendo de la tecnología, de cómo pensamos resolver todo por medio de una aplicación, esta intrusión visual y personal a la vida de los otros que es representada por Robotnik.

El personaje es megalomaniaco, maligno y narcisista, y habla mucho de lo que sucede en el mundo contemporaneo.

Esta película es la secuela del largometraje de 2020, Sonic: La Película, mezcla de acción real y animación, sobre el velocísimo erizo azul antropomórfico de los videojuegos de Sega, que luego de muchas críticas y un rediseño, alcanzó el éxito en taquillas.

La expansión de la franquicia fílmica, suma al zorro Tails y al equidna Knuckles a la aventura, y junto a Sonic deberán sacar lo mejor de sí para salvar al mundo.

Robotnik propiciará una persecución espectacular con sus archirrivales porque desea poseer la poderosa esmeralda que tiene el poder de crear y destruir civilizaciones.

Esta película es una muy buena combinación de distintas energías, conjunta bien el espíritu del videojuego, la inocencia de un preadolescente, la fuerza de un adulto y esta atmósfera de escepticismo que rodea a un ser humano para vincularse con alguien.

Todo eso nos define como humanos en algunos momentos de la vida y como resultado, propicia la evolución.

La película tiene un mensaje ‘aceptar’ y ‘adoptar’ a cualquier persona y hacerla parte de tu familia. Es un mensaje muy poderoso, es querer a quien llega a tu familia como sea y saber que hay diferencias.

El filme está hecho para entretener, sin duda, pero hay varias lecturas porque finalmente es para la familia, y en la familia importan todo tipo de mensajes, ya que se prestan para debatir.