Klaus (2019)

Jesper es perezoso y poco ambicioso, su padre es Director General de Correos, y para nadie es una sorpresa ver que su hijo holgazanea todo el tiempo en la academia postal.

Como último recurso, su padre decide enviarlo a una lejana ciudad, Smeerensburg, y tendrá a su cargo la tarea de enviar 6,000 cartas en el próximo año. Si falla, no solo será despedido, sino que se puede olvidar de cualquier herencia familiar.

Al llegar, Jesper se encuentra con un pueblo poco amistoso, y basta con que entable conversación con un par de lugareños para comprender que las familias no se comunican entre sí, y mucho menos hacen uso de la oficina postal.

A pesar de su mala actitud, Jesper decide buscar una alternativa, y descubre algo inusual en su mapa, una casa en la mitad de la nada. Al visitarlo, encuentra un taller lleno de juguetes, y a Klaus, un hombre inmenso y aparentemente aterrador.

Jesper no puede más, y huye, dejando atrás el dibujo de uno de los niños de Smeerensburg, en el que describe su vida. Antes de que pueda partir, Klaus toma la iniciativa y decide buscar al pequeño, por lo que va en busca de Jesper, y le obliga a entregarle un paquete al pequeño.

La noticia se mueve rápido por el pueblo, y de una forma inesperada, Jesper descubre una forma en la que podría salvar su empleo. Por lo que se acerca a Klaus y le pide que done más de sus juguetes, pero eso sí, la entrega deberá ser por la noche, sin que nadie se entere.

La historia es poco convencional, hace a un lado la magia y nos narra una historia más terrenal. Además, llama la atención, el hecho de que se trata de una animación 2D, que se apoya perfectamente de la tecnología para darle texturas y profundidad.

El final… descúbranlo esta temporada en compañía de la familia. ¡Felices Fiestas!