El Cristal Encantado: La Era de la Resistencia (2019)

En una época donde la animación por computadora arrasa en taquilla y deleita los ojos de los cinéfilos, un proyecto como El Cristal Encantado: La Era de la Resistencia, estelarizado por títeres, parece anacrónico.

Pero la serie ha logrado, a decir de la crítica, recapturar toda la magia del universo de fantasía ideado por Jim Henson y Frank Oz hace 37 años.

Encarado por sus creadores con un respeto casi religioso, el nostálgico filme presenta un singular reto: atraer a las nuevas generaciones.

Traer esto de vuelta es una apuesta. Ahora la gente suele ver criaturas animadas con CGI y animación fotorrealista.

Aquí, nuestras estrellas, su piel, cabello, todo, fueron creadas ‘desde el barro’. Y en la postproducción sólo corregimos errores mínimos, porque todo estaba frente a nosotros en el rodaje, los sets eran reales.

Bendecida por The Jim Henson Company, la producción, que se cuece desde hace nueve años, es una precuela del filme de 1982, sobre la decadencia del mundo mágico de Thra por la ruptura del Cristal, su fuente de poder.

Llenos de conjuros, criaturas de asombro, secuencias fantásticas y batallas épicas, los 10 episodios explican cómo los malvados Skeksis corrompieron el Cristal, y también cómo los Gelflings, nativos de Thra, hacen lo posible por no dejarlo morir.

Nuestros héroes, Rian, Brea y Deet, deciden dejar a sus familias, su zona de confort, y emprender un viaje para salvar el planeta.

En la serie, el Cristal, el corazón del mundo, está enfermo y enfermando a todos los demás. Los que lo tienen hacen mal.

Ahora, nosotros tenemos enfermo a nuestro planeta por ambición, por necesidad extrema de poder. Hay que hermanarse, como se hermanan los clanes de los Gelflings, para salvarlo. info Mario Abner Colina