Estudios británicos demostraron que el uso excesivo de estos mensajes ocasionan molestias en los dedos, el antebrazo y los hombros.
Primero fueron los problemas en las manos y dedos por usar el teclado de la PC, pero ahora, las molestias y lesiones han cambiado de origen, aunque no de lugar.
Un estudio reciente realizado por la compañía británica Virgin Mobile arrojó como resultado que el envío de mensajes SMS en teléfonos celulares está causando molestias entre los usuarios en Inglaterra.
Alrededor de 3.8 millones de usuarios de teléfonos móviles en aquel país sufre de dolor en las muñecas y pulgares por escribir mensajes de texto.
El estudio publicado en su página de internet indica que 93.5 millones de mensajes de texto son enviados diariamente entre los británicos, una forma de comunicación que se ha vuelto muy popular.
Al ser creados por movimientos cortos y repetitivos sobre las teclas del teléfono, los mensajes de texto pueden causar molestias en los dedos, lo que ha aumentado el reporte de casos de lesión por tensión repetitiva en los pulgares de los usuarios.
El estudio indica que más del 12 por ciento de la población envía hasta 20 mensajes de texto al día, mientras que el 10 por ciento manda hasta cien mensajes.
De acuerdo con la Asociación Británica de Quiroprácticos (BCA), el envío de mensajes de texto por largos períodos puede causar lesiones a corto y largo plazo. 🙁
“Con los mensajes de texto, la tendencia es mantener tus hombros y brazos tensos, lo que corta la circulación en el antebrazo, cuando en realidad necesita un flujo de sangre mayor a lo normal para realizar los movimientos constantes de los pulgares”, explicó Matthew Bennett, vocero de la BCA.
Bennett recomendó dejar de teclear mensajes de texto si hay una molestia o cambiar de mano, además de no escribir continuamente sin ningún descanso para evitar problemas.
Entérate
Algunos ejercicios que la Asociación Británica de Quiroprácticos recomienda para reducir las molestias en quienes envían constantemente mensajes cortos por celular son:
- Golpear cada dedo contra el pulgar de la misma mano; repite cinco veces.
- Estirar el pulgar de una mano con la mano contraria.
- Amarra una liga alrededor de tus dedos, incluyendo el pulgar, y trata de abrir la mano para sentir la resistencia, repite 20 veces.
- Presiona y frota con movimientos circulares por 30 segundos los nódulos donde tienes dolor.
